Este miércoles en la tarde imputaron a Milagros Iglesias, de 23 años, por la muerte de su hija, Emma Pilar Olguín, de tan solo dos meses de edad. Es crimen de la niña conmueve a todo el país, es que la víctima fue violada y asesinada a golpes y los principales sospechosos son sus padres.
La fiscal de Homicidios Andrea Lazo la imputó por homicidio agravado por el vínculo y por alevosía, luego de que autopsia al cuerpo de Emma revelara que tenía golpes de vieja data, por lo que se presume que Milagros estaba al tanto de la violencia hacia su hija.
Iglesias, de ser hallada culpable, arriesga una pena de prisión perpetua.
Su pareja, y progenitor de la beba, Gustavo Olguín (26), también arriesga una pena de prisión perpetua por Homicidio doblemente agravado por el vínculo y por abuso sexual con acceso carnal.
Mientras, la fiscal espera las pruebas realizadas al hermanito mayor de Emma, un niño de un año y medio, hijo de Olguín e Iglesias.
La madrugada de este martes, Emma Pilar Olguín, de tan solo dos meses, murió en el Hospital Humberto Notti, donde estaba internada desde el lunes, cuando su progenitora pidió ayuda porque le costaba respirar. La madre, de 23 años dejó a la beba al cuidado de su progenitor mientras ella fue a hacerse atender por una infección en la boca. Cuando regresó se encontró con la pequeña en mal estado y llamó al 911.
En la mañana de este miércoles se conocieron los detalles preliminares de la autopsia y son verdaderamente escalofriantes.
La pequeña de tan solo dos meses fue golpeada en distintas partes del cuerpo con un elemento contundente, sufrió desprendimiento de hígado y daños en el cerebro compatible con síndrome de "bebé sacudido". Además, fue abusada sexualmente y producto de lo cual sufrió desgarros en la zona genital.
Un vecino habló con Noticiero 9 y le dijo que el imputado y la detenida "parecían gente normal", que la veía a ella ir al kiosco con el cochecito de Emma y que a él lo veía poco.
"Viven en el barrio desde hace unos tres o cinco meses. Los veía poco, pero se veía normal, bajo perfil. A la chica la veía ir o venir con el cochecito, y a él volver de trabajar. No escuchamos ni gritos ni nada, no vi indicios que me hiciera sospechar", comentó Johathan sobre lo que él vio.
Sin embargo, sabe que algunos vecinos aseguran que la pareja discutía bastante. "Algunos comentan que escuchaban gritos".
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