A veces creemos que gran parte de las cosas funcionan porque así debe ser, porque es nuestro destino; pero otras creemos que es algo que nosotros planeamos e impulsamos.
El asunto es es que no sabemos qué cosas funcionan por destino y cuales funcionan por libre albedrío, incluso tal vez sea algo mucho más complejo que sólo esas dos opciones.
Estas semanas hemos avanzado y salimos de la rueda de hámster que nos hace pensar que las cosas en la vida son A o B.
No desesperés y no caigas nuevamente en el juego del control, tomá consciencia de que siempre hay otras opciones inimaginables. T
omar consciencia de lo que te hace bien y comprometerte con hacerlo viable en todos los aspectos de tu vida es el primer paso para un futuro brillante.