A un mes de la fatalidad, personal de la Policía Federal Argentina, realizó las primeras tareas de peritaje del colectivo de TurBus, y de la zona del siniestro. Se busca determinar las variables físicas que intervinieron en el accidente que dejó 19 muertos y 23 heridos.
Los profesionales intentan establecer si la tragedia fue provocada por la velocidad con la que manejaba el único imputado, el chofer chileno. Como también, el estado de la ruta y condiciones del lugar que podrían haber influido en el suceso. El informe será elevado a la fiscalía de Gustavo Pirrelo, quien lleva adelante la investigación penal.
Además, a pedido de la defensa del chofer Francisco Sanhueza, participó un perito de parte para controlar el proceso. El chofer chileno está detenido y enfrenta la acusación de homicidio simple con dolo eventual. Su abogado, Abel Cappi señaló que Sanhueza “está totalmente arrepentido por el hecho que se ha producido”.
Cappi agregó que aguardan la audiencia de prisión preventiva, a realizarse a mediados de abril, y manifestó la intención de la defensa de cambiar la calificación a homicidio culposo.
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