Un macabro hallazgo se produjo en el estado de Tocantins, en Brasil, cuando se descubrió en el interior de un caimán, de cuatro metros de largo, los restos de una persona.
Según informa el diarios locales, se cree que los restos pertenecen a un campesino llamado Adilson Bernardes de Oliveira, quien desapareció el pasado 28 de julio en una región amazónica del municipio de Lagoa da Confusão, mientras acampaba a orillas de un río.
En el interior del reptil se encontraron huesos, carne y cabello. Los mismos fueron enviados a un laboratorio forense para su análisis.
La Secretaria de Seguridad Pública de Tocantins confirmó que los restos son humanos. Pero las investigaciones continuarán y el siguiente paso será realizar un examen de ADN para confirmar si los restos pertenecen a Adilson.