Directivos de los jardines maternales privados de la provincia aseguran que están sumergidos en una profunda crisis, debido a que la gran cantidad de padres han dejado de pagar la cuota y de eso depende el sueldo de los docentes.
Sólo en el Gran Mendoza hay cerca de 300 jardines maternales privados que, como muchos otros rubros, están atravesando una dura crisis económica.
Los jardines permanecen cerrados desde el 16 de marzo y los directivos aseguran que han trasladado su problemática al Gobierno de Mendoza pero no han tenido respuesta.
Además de los sueldos de los docentes deben afrontar los gastos de alquiler, impuestos de la propiedad y del comercio, seguros y tributos fiscales entre otros.
Verónica Diaz, de la Agrupación Jardines Maternales de Mendoza, explicó el problema a Noticiero 9.