El edificio donde funcionó la Bodega Pascual Toso en Guaymallén está prácticamente demolido. La Municipalidad por riesgo a derrumbe intimó a los propietarios a tirar abajo el inmueble que data de 1890. Desde la comuna, informaron que hay por los menos 300 casas que tienen que ser destruidas.
En la esquina de calle Toso y Alberdi de Guaymallén funcionó desde 1890, la primera bodega de Guaymallén. Su propietario fue Don Pascual Toso que llegó desde Italia con la idea de elaborar vinos y espumantes.
Tras años de crecimiento y expansión, la bodega dio una salto grande y se mudó a Barrancas, Maipú. Este edificio, quedó abandonado durante mucho tiempo hasta que la comuna tuvo que intimar a sus propietarios a demolerlo ya que corría serios riegos de derrumbe.
El sector de la bodega donde están trabajando las máquinas tenía 5 mil metros cubiertos. Las obras comenzaron hace un mes y medio y estiman que ya están en un 70%.
El inmueble de la Bodega Pascual Toso no es el único que por decisión de las autoridades tiene que ser demolido. La situación habitacional en Guaymallén es complicada.
Según el último relevamiento hay 11 mil casas de adobe. De ellas, 300 ya tienen decreto de demolición. En lo que va del 2017 ya fueron destruidas 20 casas que corrían serio peligros de derrumbes antes un sismo.
Si bien en un principio la casa museo Molina Pico iba a ser demolida se decidió mejorar y reforzar las estructuras ya que es un edificio con gran valor patrimonial.
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