El próximo Gobierno Nacional asumirá el 10 de diciembre y con el objetivo de tener un fin de año tranquilo planea oficializar una suba salarial para trabajadores en blanco, jubilados y planes sociales.
Con esta medida, Alberto Fernández, pretende mejorar los ingresos de los jubilados y los asalariados.
Para los trabajadores registrados, tanto privados como públicos, se evalúa una suma fija, se especula cercana a los $5 mil y no un porcentaje, y también incrementos en los haberes jubilatorios y en los planes sociales.
Esta medida, va en el paquete de incrementos de emergencia, sobre todo a los sectores más desprotegidos como la tarjeta alimentaria.
Esos aumentos, en caso de concretarse, serán independientes de los bonos navideños y de fin de año que algunos gremios se encuentran negociando.
Estas subas tampoco tienen que ver con las subas en las jubilaciones, asignaciones familiares y asignación universal por hijo que se dieron por la Ley de Movilidad implementada por el gobierno de Macri.