Luego de que el Gobierno provincial eliminara las restricciones para circular, las calles de Mendoza están repletas de gente y con las compras de Navidad, el centro de la Ciudad se vio sobrepasado.
Sacar plata del cajero, hacer un trámite o realizar una compra en el centro mendocino fue casi imposible, las colas fueron interminables y las demoras superaron las 2 horas frente a los cajeros en los bancos.
El colapso en el sistema de cajeros generó enojo de la gente que pidió refuerzo de personal.