El viernes pasado se realizó una masiva marcha para pedir justicia por el femicidio de Florencia Romano, la menor de 14 años que fue asesinada por Pablo Arancibia, un hombre de 33 años que tenía dos denuncias previas hechas por mujeres: una por violencia de género y otra por privación ilegítima de la libertad.
Lamentablemente, un grupo de personas violentas se sumaron a la marcha, que convocó a miles de mendocinas que llenaron las calles con el reclamo pacífico de justicia.
Este grupo de violentos prendió fuego las fachadas de los edificios de Casa de Gobierno, Tribunales y la Legislatura, generando destrozos.
El Gobierno de Mendoza realizó una conferencia de prensa el sábado al mediodía, donde informó que estos daños ascienden a los $56 millones.
Las autoridades provinciales diferenciaron a quienes denominaron como un “grupo de violentos” del resto de las personas que se concentraron por Florencia. En tanto, respaldaron el accionar policial.
Según el relevamiento preliminar realizado por el Gobierno, los daños en Casa de Gobierno superan los $40 millones, en la Legislatura, los 15 millones y, en el Poder Judicial, la cifra es de un millón de pesos.
Desde el ministerio de seguridad advirtieron que ya fueron identificadas las personas que causaron los disturbios.