A Joaquín (12) lo balearon en la cara cuando volvía del colegio en Ciudad Evita, La Matanza, para robarle la mochila. Estuvo internado en grave estado y se recuperó.
Luego del alta y todavía afectado por la agresión, pudo cumplir el sueño de conocer a sus ídolos. El plantel Xeneize lo recibió en La Bombonera. Además, el propio Román Riquelme le regaló una camiseta con su nombre en la espalada.
El adolescente fue abordado por al menos dos jóvenes que terminaron disparándole en la cara y huyendo del lugar. Una testigo del ataque, Mariana Soledad dijo que el menor caminaba por la vereda cuando dos delincuentes -de entre 18 y 20 años- que se desplazaban en el mismo sentido, lo abordaron desde atrás y le dispararon.
En tanto, Jesica, empleada de una pollería cercana al lugar de los hechos contó que ella fue una de las primeras personas en asistir a la víctima. “Lo vi, salí corriendo y estuve con él. Escuché el disparo. Yo estaba en el fondo. Me asomo, no veo a nadie por una puerta, pero al asomarme por la otra sí lo veo saliendo del supermercado. Mi amiga que estaba acá me dijo que escuchó un grito de ‘ayuda”. Yo salí y veo como que le sangra el ojo, se apoya contra una pared y empieza a largar sangre por la boca”.
Jesica aclaró en ese medio que utilizó un delantal que tenía consigo para tapar el orificio de bala y detener el sangrado del chico.
Natalia, la madre de la víctima, señaló: “Le dispararon a matar porque sí. Ahora está estable pero los médicos lo están evaluando permanentemente porque puede haber daños neurológicos”.
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