Alejandro Benítez era un docente jubilado de 61 años que estaba recorriendo Bolivia con amigos. En una curva fue embestido por un camión y lo llevaron de urgencia a una salita de emergencias. Ahí les dijeron que debía ser trasladado a un hospital de mayor complejidad, pero que el traslado en ambulancia debía ser cancelado por adelantado en pesos bolivianos.
Sus amigos les ofrecían pesos argentinos con tal de que los trasladaran, pero la respuesta era "tu plata no sirve". Se demoró el traslado y el hombre murió. "Mi papá tenía dinero, pero no se lo quisieron aceptar. Ellos no lo querían recibir. Recién cuando uno de sus compañeros les ofrece la moto lo suben a la ambulancia”, aseguró su hijo Agustín.
En declaraciones a TN, el joven agregó que la Policía de Bolivia le robó a su padre los pocos pesos boliavianos que llevaba. "Mi papá se fue con más de 80 mil pesos y había cambiado 25 mil pesos argentino y le dieron 700 bolivianos”, dijo Agustín.
“Al momento de que él fallece, la policía les entrega sus pertenencias a los amigos de mi papá y entre sus cosas le dan la billetera. A él solamente le quedaban 40 pesos bolivianos y de esos 40 le dicen que le sacaron 30 para cubrir los gastos”, contó indignado.
Y agregó que desde el hospital mandaron a los amigos de su padre a comprar medicamentos porque supuestamente no tenían, pero que sí los tenían. En ese trámite perdieron aproximadamente una hora. "Salieron corriendo a buscar los remedios y tardaron aproximadamente una hora, pero cuando volvieron se dieron cuenta que faltaba un medicamento que no encontraron. En ese momento el hospital puso ese medicamento. Ellos tenían todos los insumos ahí, pero no se los dieron y se perdió tiempo".