¿Cuáles son los puntos de máximo placer sexual de hombres y mujeres?

(Por Eva Rodríguez)

Vivimos en una sociedad donde conocer, explorar e investigar sobre la genitalidad continúa siendo un tema tabú. En este capítulo de El Consultorio te acercamos tres puntos del cuerpo femenino y tres del masculino para obtener un máximo placer, ya sea en pareja o practicando la masturbación. 

Pene

Perineo: También es conocido como periné. Es una zona supersensible, de hecho es la cara externa del punto P, que se llama así porque la próstata irradia sus terminaciones nerviosas hasta ese lugar. Se encuentra entre el escroto y el ano, es un pequeño huequito de piel rugosa. Se puede estimular con caricias, arrastrando el dedo, presionando, haciendo cosquillas o con un vibrador. 

Testículos: Los testículos son tristemente olvidados en el acto sexual y es una lástima porque son muy sensibles. Incorporarlos al acto sexual es algo que tiene que ocurrir para elevar el placer del varón. ¿Que se puede hacer? Simplemente tocarlos o rozarlos ya dará placer. Pero, también se pueden sostener, acariciar, sujetarlos y masajear pasándolos de un dedo al otro. Es aconsejable comenzar lento y suave, no apretar para “que se sienta mejor”. Es importante ir registrando si tu pareja lo disfruta o no. Todo tipo de juegos son bienvenidos, incluidos los juguetes sexuales y los juegos con la boca.

Glande del pene: Comúnmente se piensa que el pene en toda su extensión tiene la misma sensibilidad. Y esto no es así. Del glande (cabeza) del pene para abajo la sensibilidad va disminuyendo. El glande sería el equivalente, por decirlo de alguna manera, al clítoris de la mujer. Tiene muchísimas terminaciones nerviosas, tantas que a algunos hombres no les gusta tanto que se lo toquen. Es ahí donde se concentra realmente el placer, se puede tocar, masajear, besar, jugar con movimientos circulares. Lo importante es que no intentes hacer proezas tipo porno, por ejemplo el gran mito de garganta profunda porque la base del pene no tiene casi sensibilidad en comparación con el pene.

Vulva

Labios internos o menores: Son dos pliegues de piel bastante distinta a la de los labios externos. La piel de los labios internos es más delgada y más sensible. Es perfectamente normal que los labios sean diferentes entre sí, uno más grande que el otro, con diferentes formas, con diferentes colores. Las representaciones que típicamente se utilizan de las vulvas, tanto médicas como en el porno muestran imágenes demasiado perfectas, rosaditas, pequeñas. Estas imágenes pueden hacerte sentir incómoda con tu forma. Lo importante es que sepas que tus labios internos están ahí para protegerte y sobre todo darte placer y no se rigen a los caprichos estéticos de nadie. Para tocarlos usar lubricantes, suaves roces o con la boca en formas circulares o como a vos te guste.

Glande del clítoris: Es una bolita que tenemos adentro del capuchón y es la única parte visible de este órgano hacia afuera. El clítoris es mucho más grande, pero se extiende por dentro de la vagina. Es un puntito escondido, que para verlo no tenés más que mover o correr el capuchón, tiene un montón de terminaciones nerviosas por eso es que hay que tocarlo delicadamente, porque si se hace muy bruscamente puede provocar dolor. Justo donde se unen los labios mayores, vas a sentir una protuberancia, una bolita. En cada persona con vulva el tamaño del glande del clítoris puede variar, a veces es casi imperceptible y otras veces muy grande. Cuando estás excitada, el glande se erecta y crece en tamaño.

Vagina: Lo que vos ves es lo que llamamos la horquilla vaginal o introito vaginal, la cavidad. La vagina en sí misma es un órgano interno, es por donde ingresa un tampón, una copa menstrual, un juguete sexual, un pene, baja la sangre menstrual o sale por ahí un bebé. La entrada a la vagina no debería doler, ni en la penetración sexual, ni en la consulta al ginecólogo. Si cuando algo ingresa a tu vagina sentís dolor es porque hay algo que chequear con tu médico para evaluar que podría estar pasando.