En la localidad de Humahuaca, en la provincia de Jujuy, se llevó a cabo un insólito acto escolar. La intención del mismo era pedir por la paz mundial y para ello se crucificaron a 5 personas, entre ellas un adolescente y un niño de 9 años.
De acuerdo con el diario local El Tribuno, el impulsor de esta iniciativa fue el párroco de la iglesia local, Jesús Olmedo, quien consideró al acto como “hermoso”. La crucificación del menor habría tenido como intención la simbolización de lo que pasa con muchos niños en el mundo:
“Ahí tenemos a un chiquito crucificado, que dice que él quiere, porque hay muchos niños que están muriendo por las guerras, el terrorismo y el hambre en el mundo”, sostuvo el párroco.
En la “Marcha por la Paz y la Justicia" el niño pasó tres horas atado a una cruz, hasta que comenzó a llorar. Luego, el chico fue bajado de la cruz y el sacerdote lo invitó a decir algunas palabras. Según relataron testigos que participaron de la ceremonia, ante el silencio del niño, el cura replicó: "No quiere decir nada. ¡El silencio es más fuerte que el grito!".
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