El pasado miércoles la conductora de televisión y modelo argentina Paula Cháves vivió un gran susto mientras se dirigía a una guardia para atender a su hijo descompuesto, Baltazar, de cinco años. En plena autopista su hija Filipa -la más pequeña- tuvo una convulsión: "Me pone muy nerviosa hablar de esto porque la verdad que me acuerdo y me bloqueo. En la bajada de Panamericana me doy vuelta y la veo a mi hija Filipa con espuma en la boca y los ojos para atrás. Abrí la ventana y empecé a gritar desesperadamente como lo haría cualquier mamá, papá que esté con su hijo a bordo" contó.
Si bien este episodio en la mayoría de los casos es benigno, y puede aparecer desde los 6 meses hasta los 5 años de edad, manifiesta distintos grados según su duración. La pediatra María Carolina Ferrarese explicó al respecto: "Pueden ser convulsiones típicas, que les decimos convulsiones simples, o convulsiones febriles atípicas o complejas. Las simples en general duran menos de quince minutos, son generalizadas, hay movimientos de todo el cuerpo. En cambio en las complejas, la duración es mayor y puede ser focalizada. Tienen distinto pronóstico".
Es importante aclarar que las convulsiones son cambios temporales súbitos en el movimiento y están causadas por impulsos eléctricos anormales en el cerebro. El tipo específico dependerá de: dónde empieza, cómo se extiende y cuánto o qué parte del tejido cerebral toma parte. Y aunque generalmente no tienen consecuencias negativas para su desarrollo posterior o aprendizaje, los padres viven ese momento con desesperación y temor. Sobretodo cuando se manifiesta por primera vez.
Es por ello que resulta clave comprender cuál es el accionar correcto y qué maniobras no corresponden en una situación así. En el siguiente link encontrarás la nota completa con la doctora.