Hace un año, la vida de Chano Charpentier quedó pendiendo de un hilo cuando recibió un disparo en el abdomen, lo que le provocó que perdiera el bazo, un riñón y parte del páncreas. Luego de aquel triste episodio, el músico fue internado en un centro de rehabilitación, donde aún permanece.
Su madre, Marina Charpentier contó que Chano "está consciente de que la pasó muy mal y sigue dando la batalla por la recuperación. Lleva 73 días internado, sin consumo, con una vida tranquila, haciendo tratamiento y con ganas de volver a su vida".
"Ojalá que la enfermedad no le juegue una mala pasada y ojalá que lo logre", agregó en una entrevista con Vero Morilla y Lucas Mella en Más allá de las noticias, por Radio Colonia.
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El fatídico día que Chano recibió el disparo fue confuso. Ocurrió en Exaltación de la Cruz, donde el músico tuvo un brote psicótico tras consumir drogas, por lo cual su familia quería internarlo para tratar su adicción, y él se negaba. Llegó la Policía y el músico, con un cuchillo en su poder, corrió hasta los uniformados al grito de "te voy a matar", según la versión de los oficiales.
El policía que le disparó es Facundo Amendolara que está imputado por lesiones gravísimas. “Cuando estuvo aproximadamente a un metro y medio de distancia, ya a punto de alcanzarme con la cuchilla (de 30 cm. de longitud), le disparé como último remedio para salvar mi integridad física, para salvar mi propia vida, ante tan desaforado ataque”, presentó por escrito el policía en la fiscalía de Zárate.
Ante esto, Marina dijo: "Para nosotros ya está, terminó. Todo lo que ocurrió es producto del problema de la Ley de Salud Mental que no se ejecuta como corresponde, sin personas preparadas y calificadas atendiendo las situaciones en las que uno pide ayuda".
"Tanto Chano como Amendolara siguen con su vida sin rencor. No creo que el policía haya querido lastimar a mi hijo y mi hijo no quiso lastimar a nadie", agregó.
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