Muchas veces dejamos pasar mucho tiempo entre las comidas principales, y cuando sentís hambre, abrís la heladera o la alacena y elegís el primer alimento que ves.
Este hábito puede ser perjudicial porque no estás planificando las comidas correctamente y eso es esencial para cuidarse.
No se trata de vivir a dieta, pero sí de hacer semanalmente un esquema de comidas para hacer una compra consciente y no tener la necesidad de improvisar.
Tampoco es cuestión solo de almuerzos y cenas, hay que incluir snacks saludables que ayuden a completar las cinco ingestas diarias sin recurrir a la comida basura.
La Licenciada en Nutrición, Daniela Ortega (Mat 1178), enseña las mejores opciones para incorporar estos snacks saludables a nuestra dieta.
Un snack es una pequeña ración de alimentos que se suele ingerir generalmente a media mañana y durante la tarde.
Su ingesta ayuda a mantener los niveles correctos de glucosa en sangre y proporciona la energía y los nutrientes necesarios durante el día.
Así, ayudan a sentir saciedad y mejoran el rendimiento físico e intelectual, a la par que hacen las digestiones más sencillas.
Por lo tanto, comer algún snack en los momentos adecuados ayuda a llegar al almuerzo o la cena sin ansiedad.
Un snack saludable es el que combina alimentos apropiados, que no tengan gran cantidad de grasas y azúcares.