Asociaciones en defensa del agua volvieron a denunciar al empresario Daniel Vila por el uso exclusivo de las aguas de la cascada San Isidro. Analizan medidas a tomar y piden que se siga investigando.
El conflicto no es nuevo. Mucho menos las denuncias. Desde hace años, asociaciones en defensa del agua, pero también vecinos autoconvocados que padecen el problema en primera persona, vienen luchando por tener algo básico: agua y libertad.
Es que no solo denuncian a Daniel Vila y Dalvian SA por hacer uso exclusivo de la cascada san Isidro, sino también por “privatizar” terrenos que son públicos.
Sin embargo, el conflicto parece tener demasiados vericuetos legales y técnicos, a pesar del pronunciamiento de la Suprema Corte de Justicia.
Por eso, las asociaciones insisten en su lucha por lograr que los 500 millones de litros anuales que tiene la cascada san Isidro sean de dominio público.