La Justicia, a través del trabajo de los forenses, señaló que los cuerpos presentaban heridas de bala y puñaladas. En estos momentos, la policía busca las armas con las que se cometió el crimen.
Los cadáveres de las hermanas Esther (41) y Sara (39) Castro fueron hallados el martes en un pozo de agua de su casa en la ciudad de Córdoba. Por el cromen, están detenidos l hijo de una de ellas y otro joven familiar.
La Policía investiga si en el lugar hay otros cuerpos enterrados, entre ellos el del padre de las víctimas que habría fallecido meses atrás, aunque por el momento no se obtuvo documentación que lo acredite.
La Justicia señaló que la casa era ocupada por una familia disfuncional, con integrantes con enfermedades mentales, en un entorno donde se habrían producido abusos y posibles nacimientos y fallecimientos que no fueron documentados.
La Justicia señaló que los dos jóvenes detenidos serán imputados por el delito de 'homicidio calificado y homicidio simple en concurso real', en tanto una adolescente de 17 años se encuentra a disposición de la justicia juvenil acusada de supuesto "encubrimiento agravado".
Los acusados serán sometidos a pericias psiquiátricas y psicológicas para establecer sus capacidades cognitivas y si están o no en condiciones de afrontar un proceso.
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